“We were completely ambushed and we didn’t know it”: advisor of Miguel Uribe’s team narrates the moments of panic they experienced during the attack in Bogota. Here’s the full interview 
“¡Nos emboscaron y no lo sabíamos!”: El dramático relato del equipo de Miguel Uribe tras el ataque en Bogotá
Bogotá — El día parecía comenzar como cualquier otro en la intensa agenda política de Miguel Uribe, senador y figura emergente del nuevo conservadurismo colombiano. Su equipo, comprometido y acostumbrado al ritmo agitado de la vida pública, no imaginaba que esa mañana en la capital se convertiría en una experiencia que marcaría sus vidas para siempre.
🔴 “Nos emboscaron y no lo sabíamos”, así lo describió uno de los asesores principales de Uribe, quien, visiblemente afectado, rompió el silencio y compartió en una entrevista exclusiva los angustiosos minutos de terror vividos durante el ataque perpetrado en una vía de Bogotá el pasado fin de semana.
“Todo fue muy rápido… ni siquiera tuvimos tiempo de reaccionar”
El asesor —cuyo nombre reservamos por seguridad— relató con voz quebrada cómo fueron sorprendidos por lo que inicialmente pensaron que era un percance vial o una simple alteración del orden público. “Estábamos en caravana, cumpliendo con una visita de agenda comunitaria. Habíamos tenido reuniones con líderes locales en el suroccidente de Bogotá. Todo iba bien, hasta que empezamos a notar movimientos extraños”.
Según el testimonio, en cuestión de segundos el equipo fue blanco de una emboscada con ráfagas de disparos y objetos contundentes. “Pensamos que eran petardos, pero no. Eran impactos, explosiones controladas. Las ventanas del vehículo estallaron. Se escuchaban gritos, era una escena de pánico”, narró.
“Fue como una película de guerra”
El testigo asegura que la magnitud del ataque no fue improvisada. “Esto no fue un acto espontáneo de vandalismo. Fue planeado, fue con inteligencia previa. Nos estaban esperando. Supieron por dónde íbamos a pasar. Era una trampa”.
Los minutos posteriores fueron caóticos. “Nos lanzamos al piso del carro. Algunos intentaron proteger a Miguel (Uribe). Otros trataban de pedir ayuda por radio. El problema fue que en esa zona, la señal era intermitente. Estábamos atrapados”.
“Pensamos que no saldríamos vivos”
Quizá la frase más dura de la entrevista llegó cuando el asesor, ya con lágrimas en los ojos, confesó: “En un momento, creí que no saldríamos vivos. Pensé en mi hija. Pensé en mis padres. Pensé en que tal vez esto era el final”.
El miedo se apoderó del grupo, pero también la determinación. “A pesar del pánico, hubo quienes reaccionaron con valentía. Nuestro conductor, por ejemplo, tomó una maniobra arriesgada y logró desviar el vehículo a una calle alterna. Esa decisión, sin duda, nos salvó la vida”.
¿Quién está detrás del atentado?
Hasta el momento, las autoridades investigan los hechos y no se ha confirmado la autoría del ataque. Sin embargo, desde el entorno de Uribe no descartan que se trate de una retaliación política. “Estamos tocando fibras sensibles. Estamos denunciando corrupción, estamos enfrentando estructuras criminales que han gobernado desde la sombra. Esto no fue al azar”, asegura el asesor.
La Fiscalía y la Policía Metropolitana de Bogotá ya desplegaron un equipo especial para identificar a los responsables. “Tenemos videos, registros de cámaras y testimonios. No vamos a permitir que esto quede impune”, declaró una fuente cercana a la investigación.
El impacto emocional en el equipo
Más allá de los daños físicos o materiales, lo que más ha golpeado al equipo de Miguel Uribe es el trauma psicológico. “Desde ese día no hemos dormido bien. Hay compañeros que todavía no pueden volver a salir a la calle. Nos sentimos vulnerables”, reconoce el asesor.
La seguridad del senador fue reforzada de inmediato, y algunos miembros del equipo fueron reubicados temporalmente por recomendación de las autoridades. Sin embargo, el miedo persiste. “Sentimos que algo cambió en nosotros. Esa sensación de que te pueden atacar en cualquier momento, sin previo aviso… es brutal”.
Miguel Uribe se pronuncia: “No me van a callar”
Horas después del incidente, el senador Uribe dio una declaración pública en la que reafirmó su compromiso con la verdad y la justicia:
🔊 “No me van a intimidar, no me van a callar. No estoy solo. Estoy con los colombianos que sueñan con un país sin miedo, sin chantajes, sin violencia política”.
Su mensaje fue recibido con solidaridad por parte de varios sectores políticos, incluso de la oposición. “Hoy no se trata de ideologías, sino de rechazar el terrorismo y defender la democracia”, expresó una senadora del Partido Verde.
Colombia, otra vez golpeada por la sombra de la violencia
El ataque al equipo de Uribe reabre una herida que Colombia no ha podido cerrar: la violencia política, esa que ha cobrado miles de vidas a lo largo de los años y que, lejos de desaparecer, parece mutar y adaptarse a nuevas formas.
Desde asesinatos selectivos de líderes sociales hasta amenazas a periodistas y ahora ataques directos a figuras políticas visibles, el mensaje parece claro: la intolerancia sigue viva.
Un llamado a la reflexión y a la acción
El relato del asesor no solo estremece por lo gráfico, sino porque revela la fragilidad de nuestras garantías democráticas. “Hoy fuimos nosotros, mañana puede ser otro grupo, otro candidato, un líder comunitario, un periodista. No se trata solo de proteger a los famosos, sino de entender que todos estamos en riesgo si permitimos que el miedo mande”, concluyó.
Al cierre de esta entrevista, el asesor aún mostraba señales del impacto, pero también una nueva determinación: “Podrán intentar silenciarnos, pero no podrán con la verdad”.
📌 Nota final: Si tú o alguien que conoces ha sido testigo o víctima de hechos similares, no dudes en comunicarte con las líneas de atención ciudadana y denunciar. Solo con la voz colectiva podemos enfrentar la violencia.
